ebook_ADHD2019_spanish

Para algunos, esto puede incluir el alentarlos a unirse a equipos deportivos o to- mar clases y prácticas para fortalecer sus talentos en arte y música. Otros pueden tener interés en hacer manualidades o cocinar o hacer tareas mecánicas. Cuando los padres fomentan y muestran orgullo por las habilidades y logros de sus hijos, pueden fortalecer su autoestima y las motivaciones positivas de su hijo o hija con TDAH y de esa manera, disminuir un poco la retro alimentación negativa que puedan estar recibiendo, especialmente si su TDAH no está siendo tratado de manera adecuada. Mantener un ambiente de apoyo y una rutina dentro de una familia con uno o más niños que tienen TDAH es especialmente difícil sobre todo cuando uno de los padres tiene un TDAH, el cual no está tratado. A pesar de las buenas intenciones, ese padre puede encontrarse con que es muy difícil mantener rutinas tanto para sí mismo como para el resto de la familia. Si el padre de un niño con el trastorno, tam- bién tiene TDAH aún no diagnosticado y mucho menos tratado, podría ser muy útil para ese padre buscar evaluación y tratamiento para su propio TDAH. Tomar tales medidas sería consistente con la “mentalidad de crecimiento” descrita abajo. “MENTALIDAD” EN AQUELLOS CON TDAH En su libro Mentalidad, Carol Dweck 9 introdujo el término “mentalidad fija” para describir a aquellos que sienten que han nacido con cierta inteligencia y habili- dades y que algunas veces pueden obtener reconocimiento y éxito, pero, en otras ocasiones es simplemente insuficiente y no hay realmente nada que puedan hacer para cambiar su situación. Es como si se consideraran un “producto terminado” incapaz de desarrollarse más allá de su nivel. Esta autora, contrasta esto con la “mentalidad de crecimiento” , la cual supone que uno puede trabajar para desar- rollar y mejorar sus capacidades, incluso después de no haber tenido éxito. Esta mentalidad ve al “Yo” continuamente como “una obra en proceso” en donde el cambio es posible a través del esfuerzo y la persistencia. Algunos niños a menudo son reconocidos por los padres y profesores quienes dicen cosas como: “¡Oh, lo hiciste muy bien!, ¡eres muy inteligente!, ¡tienes mucho talento!” como si su buen desempeño fuera simplemente el resultado de un talento natural. En contraste, cuando un niño es reconocido por haber trabajado duro y haber hecho un buen trabajo, el énfasis se encuentra en el esfuerzo, no solo en el talento y las habilidades. Cuando el resultado obtenido es decepcionante, es más sencillo ayudar a una persona con “mentalidad de cambio” a centrarse en cómo puede mejorar su rendimiento para obtener un mejor resultado en el futuro. Muchos niños con TDAH experimentan una retroalimentación negativa tan persistente y poderosa de los que los rodean, que aprenden a mirarse a ellos mis- mos con una “mentalidad fija” en la que se consideran destinados a la mediocri- 78 Rohde, Buitelaar, Gerlach & Faraone (editores)

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzg2Mjgy